Cristina Pedroche ha detallado la inspiración de su vestido para las Campanadas, con un detalle oculto.

Cristina Pedroche ha vuelto a convertirse en el centro de atención durante las Campanadas de Nochevieja.

Un año más, la presentadora ha presentado junto a Alberto Chicote, marcando una década desde su primera retransmisión en la Puerta del Sol.

Con su icónico vestido, Cristina Pedroche no solo ha deslumbrado por su originalidad, sino que también ha lanzado un poderoso mensaje social.

La velada comenzó con la presentadora cubierta por una capa XXL beige con volantes, que ocultaba el vestido más especial de toda su trayectoria.

Al desabrocharla, dejó al descubierto un vestido joya midi adornado con 40 pezones fabricados con su leche materna.

Este diseño, elaborado con más de 2.500 horas de trabajo y un peso superior a los 42 kilos, ha sido descrito por Josie, su estilista habitual, como “una deidad femenina asociada a la maternidad, la tierra, la fertilidad, la agricultura y la vida”.

El vestido es fruto del trabajo de los artesanos Felipe Vivas y Manuel Carrión, de Vivascarrion, junto con Belén Mozas, de Morir de Amor.

Sin embargo, no es solo una obra de arte sino también un símbolo.

A través de su colaboración con UNICEF, Cristina Pedroche ha buscado visibilizar la necesidad de proteger a los niños frente a la violencia, el abuso y la explotación.

El detalle que escondía el vestido de Cristina Pedroche en un guiño a su embarazo | @cristipedroche

“Tenemos el deber de luchar para garantizar el bienestar de cada niño y niña, como bien común: para que puedan soñar, para que puedan alcanzar todo su potencial y que todos sus sueños se conviertan en realidad.

Al 2025 le pido paz, tolerancia y responsabilidad”, expresó con orgullo la presentadora.

Tras un año cargado de grandes desafíos y aprendizajes, Cristina Pedroche compartió reflexiones sobre su familia, especialmente su hija Laia y el bebé que espera junto al chef Dabiz Muñoz.

“Ha sido un año de cambio, de crecimiento, de convivir con muchísimos miedos y de hacer catarsis, de resurgir, de aprender.

Sobre todo, este año he aprendido de mi hija. A través de sus ojos, estoy viviendo esta Navidad con más ilusión, más magia y más inocencia que nunca”.

Finalmente, Cristina Pedroche cerró su intervención con un mensaje contundente: “La inocencia de los niños debería permanecer intacta y nadie debería destruirla. Nuestros niños son el futuro y protegerlos es nuestra responsabilidad”.