Fallece repentinamente el periodista Agustí Forné, referente del mundo casteller de TV3.

Agustí Forné ha fallecido de forma repentina a los 62 años, dejando una huella imborrable en el periodismo casteller y en la televisión catalana.

El periodista, que trabajó durante 35 años en TV3, se destacó como un referente en la cobertura de la cultura de los castells, un ámbito en el que dejó un legado profundo y apreciado.

De hecho, su última retransmisión fue el pasado domingo, por lo que su muerte ha sido un golpe para todos sus conocidos y familiares.

Agustí Forné comenzó su carrera en el periodismo deportivo en la Cadena SER,  donde cubrió clubes como el Nàstic de Tarragona y el Reus Ploms.

También colaboró con el Diari de Tarragona y el Nou Diari en sus primeros años de profesión.

En 1989, se unió a TV3 en la delegación de Tarragona,  donde se dedicó a la información general y llegó a presentar la edición tarraconense del Telenotícies Comarques.

Durante más de dos décadas, hasta 2015, fue el delegado de TV3 en esta demarcación.

Fallece Agustí Forné, mítico periodista de TV3 tras su última retransmisión el domingo | 3Cat

A lo largo de su extensa trayectoria, Agustí Forné cubrió con detalle el mundo de los castells, logrando convertirse en uno de los grandes referentes en este ámbito.

Su cobertura iba más allá de las tradicionales diadas castelleras. A lo largo de los años documentó aspectos novedosos del mundo casteller, como el desarrollo de un modelo matemático que podía hacer las piñas más seguras, el uso de herramientas de inteligencia artificial para prever si un castillo se descargaría o caería, y cómo las colles utilizaron videoensayos durante la pandemia para mantener la cohesión del grupo.

Agustí Forné también fue una figura conocida fuera del ámbito casteller, llegando a participar en el falso documental “Els bons minyons”.

Este narraba con humor cómo el celibato había sido la clave del éxito de los Minyons de Terrassa.

Su carisma y su sentido del humor le llevaron a aparecer en programas como ‘Polònia’ y ‘APM?’,  donde su estilo personal dejaron una marca imborrable.

Su muerte ha dejado un profundo vacío en el periodismo catalán, especialmente en el mundo casteller.

Su voz y sus reportajes fueron fundamentales para la difusión y comprensión de esta tradición.