Isabel Pantoja y su familia llevan semanas sufriendo por las filtraciones de información sensible a la prensa.

Las noticias sobre intimidades y supuestas irregularidades hacen que el clan Pantoja busque el origen de los ‘soplos’, que ha compartido con Espejo Público algunas nuevas y llamativas exclusivas.

El entorno de Isabel Pantoja estaría haciendo aguas.

Al menos eso es lo que parece por las confesiones tan delicadas y privadas que están saliendo a la luz.

“Ha habido mucho sobre”

Que la artista ha gozado, y probablemente siga haciéndolo, de una vida exclusiva y repleta de lujos no parece ningún secreto para nadie, a juzgar por la larga y exitosa carrera de Isabel Pantoja.

Aun así, el ‘garganta profunda’ de Cantora sí comparte información que sorprende y podría implicar una serie de consecuencias económicas y legales contra la tonadillera.

El filtrador (o filtradora) de la información sugeriría que se manejaban grandes cantidades de dinero negro, y añadía lo siguiente: “Ella (Isabel), como no tuviera 20 o 30.000 euros encima, no era feliz”.

Según va a avanzando su testimonio, la fuente parece venirse arriba y hace unas afirmaciones alarmantes, en referencia al dinero que le habría dado Julián Muñoz.

Ese dinero procedería de irregularidades y delitos por los que el exalcalde de Marbella cumplió condena: “El dinero que ella recibió de Julián Muñoz lo tiene muy camuflado”.

“Se le mete un hámster, y se muere”

Sobre el hermano de Isabel, Agustín Pantoja, el confidente asegura que “es el ser más malo que puede haber en la Tierra”.

Además también tendría también una predilección especial por el dinero en efectivo, tal sería ese gusto por el metálico que el topo decía lo siguiente: “A Agustín se le mete un hámster arriba y se muere, si se come los billetes.

(…) Va a antes el dinero que su propia salud”.

Viajes y maletas, muchas maletas

El anónimo testigo no encuentra explicaciones ante unos curiosos hechos que afirma haber presenciado.

Supuestamente Agustín se iría de fin de semana, o durante 3 o 4 días, cargado con mucho equipaje, explicable hasta cierto punto.

Eso sí, lo más raro sería que a su regreso a la finca familiar el hermano de Isabel portaría aún más maletas que a su marcha.

El ‘topo’, por mucho que hace cuentas y busca una explicación razonable, no parece encontrarla: “Por mucho que valga Cantora, las dos casas que tiene en Sevilla, el garaje, la casa de El Rocío, y la deuda millonaria, no…

Eso es que están sacando el dinero”.