Juan Carlos y Sofía viven vidas separadas desde hace más de 50 años, una realidad que les ha llevado a forjar alianzas que les han acompañado hasta nuestros días.

GTRES

Los polémicos audios del rey Juan Carlos (86 años) a Bárbara Rey (74 años) han destapado lo que era un secreto a voces, el matrimonio de los reyes eméritos se rompió en el mismo momento en el que engendraron un heredero.

Así se lo confirmaba el entonces monarca a su amante: “Vida familiar, ninguna. En verano algo más, pero no hablamos (…)

Entre tú y yo, voy a ser egoísta, para mí es comodísimo porque como Reina cumple de maravilla. Encima, aguanta, no se va con otro”.

Aunque el propio Juan Carlos le contaba a Bárbara Rey que al principio doña Sofía expresaba su malestar por sus idas y venidas, pronto aceptó su papel como madre y Reina, nada más.

Aunque de todo esto hace más de 50 años, escuchar al propio Juan Carlos de viva voz hablar de sus problemas maritales ha reavivado el escándalo familiar hasta el punto de que la prensa internacional se ha hecho eco de todo.

“Vergonzoso”, dicen desde Reino Unido, los franceses por su parte señalan al emérito como el “culpable” de enturbiar la imagen de la Casa Real.

En Alemania van más allá y dividen en dos bandos muy diferenciados los aliados que Juan Carlos y Sofía han tenido a lo largo de los años.

Según ellos, mientras que los apoyos de la madre de Felipe VI se han multiplicado, los del monarca emérito se han visto notablemente reducidos.

El núcleo duro de la reina Sofía en los mejores y peores momentos

A lo largo de toda su vida, la madre de Felipe VI se ha rodeado de un núcleo muy cerrado y discreto.

Al margen de su inseparable hermana Irene, quien ha sido (y sigue siendo) su confidente, doña Sofía también gozaba del apoyo de su hermano Constantino y su cuñada Ana María.

Pilar Eyre recuerda que la propia Irene quien en uno de los peores momentos de su matrimonio con don Juan Carlos le dijo: “No lo abandones nunca, no dejes de ser reina.

¿Quieres ser como yo?”.

A su familia hay que sumar el sostén de su prima Tatiana Radziwill, a la que siempre trató como una hermana.

La hemos visto veranear en el Palacio de Marivent durante años y su vínculo es tan fuerte que conoce los secretos más ocultos de la madre de Felipe VI.

Laura Hurtado de Mendoza ha sido la mano derecha de la emérita. Esa persona discreta y leal que vivió junto a ella los mejores y peores años de su vida.

No obstante, el apoyo más inesperado llegaba hace unos días, en medio de un acto institucional, y por parte de la Ministra de Defensa, Margarita Robles.

Ni corta ni perezosa, la política quiso dedicarle unas palabras de agradecimiento a la emérita, discurso en el que dejó claro que está de su lado.

“Estamos orgullosos del trabajo que lleva realizando tantos años por España.

Estamos con usted. Hoy, en este momento, nuestro cariño a usted y nuestro agradecimiento”.

Los pocos aliados del rey Juan Carlos tras su marcha a Abu Dabi

La revista alemana ‘Bunte’ ha seguido muy de cerca todo el escándalo que rodea a la familia real y ha aprovechado para resaltar los “pocos” aliados que le quedan al emérito.

En su reciente visita a Sanxenxo, Pedro Campos no solo ha actuado de anfitrión sino también como el buen amigo que es desde hace décadas.

A él, se suma el apoyo incondicional de la infanta Elena.

De sus tres hijos, la duquesa de Lugo es, probablemente, quien más cerca está de su padre.

Muy diferente es el vínculo actual que tiene con don Felipe.

En el artículo alemán definen su relación con el Rey como “tensa”, y es que no podemos olvidar que fue el actual rey quien obligó a su padre a salir de España en 2020 después de que su padre se viera salpicado por una serie de escándalos financieros que ponían en tela de juicio su transparencia con la nación.