La llegada de Letizia Ortiz a la Casa Real española, concretamente al Palacio de la Zarzuela, fue recibida con ciertas reservas y dudas por parte de la familia Borbón.

Desde el principio, Doña Elena, la hermana mayor del Rey Felipe VI, mostró su escepticismo hacia la futura reina.

Aunque no era la única que sentía preocupación por la incorporación de Letizia a la familia real, fue Doña Elena quien, según diversas fuentes, pronosticó que la relación entre Letizia y la monarquía española sería problemática.

Se cumple la profecía que hizo la infanta Elena el día que Letizia puso un  pie

Desde la entrada de Letizia en la familia real, Doña Elena trató de advertir a su padre, el rey emérito Juan Carlos I, sobre la personalidad de la nueva princesa de Asturias.

Según se dice, Elena consideraba que Letizia no era de fiar y que su carácter fuerte y determinado podría acabar causando fricciones internas en la familia real.

Con el paso de los años, estas advertencias parecen haber tomado cuerpo, especialmente tras la abdicación de Juan Carlos I en 2014.

Desde entonces, la relación entre Letizia y los Borbones se ha deteriorado, según algunas fuentes cercanas a la familia real.

Las tensiones han llegado a un punto en el que la propia Doña Elena, que siempre había sido muy cercana a su hermano, el Rey Felipe, se ha distanciado de él debido a la influencia de Letizia en las decisiones familiares.

El incidente más notable que ha alimentado estas tensiones fue el enfrentamiento entre Letizia y la Reina Sofía, madre de Felipe VI, durante una misa de Pascua en 2018.

Este episodio, que fue captado por las cámaras, mostró a Letizia aparentemente impidiendo que su suegra se tomara una foto con sus nietas, lo que generó un gran escándalo mediático.

Para muchos, este fue un ejemplo claro del control que Letizia ejerce sobre la familia real, algo que Doña Elena había predicho.

Además, la relación de Letizia con los medios de comunicación ha sido otro punto de fricción.

Se ha comentado que Letizia ha logrado ejercer un control significativo sobre la imagen pública de la familia real, algo que ha generado tensiones con otros miembros de la familia, quienes sienten que su privacidad ha sido invadida y manipulada.

Este control mediático, que muchos atribuyen a la experiencia previa de Letizia como periodista, ha sido criticado por algunos, incluyendo a Doña Elena, quien siempre ha preferido un enfoque más discreto y tradicional.

Otro aspecto de la profecía de Doña Elena que parece haberse cumplido es la ruptura de la relación entre Felipe VI y sus hermanas.

Mientras que la infanta Cristina se ha distanciado de la vida pública tras los escándalos judiciales que afectaron a su marido, Iñaki Urdangarin, Doña Elena ha optado por mantener un perfil bajo, aunque siempre apoyando a su padre, el rey emérito, en sus últimas visitas a España.

Este distanciamiento familiar ha sido doloroso para Doña Elena, quien siempre valoró la unidad de los Borbones.

En conclusión, la profecía de Doña Elena sobre la influencia de Letizia en la familia real parece haberse cumplido en varios aspectos.

La relación entre Letizia y la familia Borbón ha estado marcada por tensiones y conflictos, y la unidad familiar ha sido puesta a prueba en numerosas ocasiones.

Lo que comenzó como una advertencia de la infanta Elena se ha convertido en una realidad que ha moldeado la dinámica interna de la monarquía española en los últimos años.